Rodrygo Goes se salió en el partido que jugó el Real Madrid anoche. Durante los 90 minutos fue un auténtico puñal por la banda, mostrando todo su repertorio de regates y movimientos de desborde. Jugó de extremo por la izquierda, en su posición natural, y fue el mejor del partido.
Lo cierto es que, cada vez que salta al terreno de juego, Rodrygo deja muestras de su enorme calidad y pone en aprietos a Carlo Ancelotti. Ayer, en la jornada 21 de LaLiga, el brasileño volvió a sacar todos sus trucos de magia y el técnico italiano no sabe qué hacer.
Y es que, en estos momentos, pese a que Rodrygo es uno de los jugadores más en forma del Real Madrid, no tiene un sitio asegurado en el once titular. Y, además, cuando tiene la ocasión de jugar, lo hace en una posición que no es la suya.
Rodrygo aprovecha la baja de Vinícius para destacar
Rodrygo está acostumbrado a ocupar la banda derecha o el centro del ataque blanco. Las bajas de Karim Benzema o la rotación con Fede Valverde le han llevado a ocupar esos espacios, pero todos sabemos que esas no son las posiciones en las que puede exprimir toda su calidad.
Y, precisamente por ello, ayer fue un día muy especial. Y es que Rodrygo aprovechó la sanción de su amigo Vinícius para demostrar que Carlo Ancelotti no siempre acierta. Ocupó su posición natural, la de extremo izquierdo, y no defraudó a nadie. Incluso el técnico italiano acabó sorprendido con su actuación.
Normalmente, Rodrygo tiene que observar cómo es Vinícius el que se encarga de ocupar el flanco izquierdo del ataque del Real Madrid. Ancelotti lo considera un fijo y ni siquiera cuando juega mal se atreve a cambiarlo. Sin embargo, el gran papel que desempeñó Rodrygo anoche en el Santiago Bernabéu ha creado un dilema en la mente de Carlo Ancelotti, que ya no lo tiene tan claro.
Rodrygo, un quebradero de cabeza para Carlo Ancelotti
Rodrygo es una de las piezas en las que más confía Carlo Ancelotti para darle la vuelta a los partidos, pero ayer tuvo la ocasión de disputar el partido entero y fue el mejor del Real Madrid.
Según la estadística avanzada, Rodrygo ayer completó el 97% de los pases (cinco de ellos catalogados como pases clave), provocó un penalti, disparó cuatro veces a portería y completó 5 regates de forma exitosa. Unos números que asustan y que han hecho dudar a Ancelotti.
Está claro que el rendimiento de Rodrygo merece más minutos y protagonismo de los que está teniendo, pero Carlo Ancelotti no sabe cómo resolver el puzzle. Vinícius y Benzema son fijos y el '21' del Real Madrid solo puede ocupar el costado derecho o esperar a que falten.
Rodrygo valora todas las opciones que tiene encima de la mesa
Rodrygo no parece excesivamente preocupado por la situación que atraviesa en el Real Madrid. Es consciente de que tiene por delante a dos de los mejores delanteros del mundo, pero cada vez que puede, demuestra que él también merece su sitio.
A Rodrygo le encantaría ocupar el carril de su amigo Vinícius, pero Carlo Ancelotti no le había dado ni bola hasta ayer. Su partidazo demuestra que lo puede hacer y es posible que haga cambiar muchas cosas, pero lo normal es que Vinícius recupere su lugar y Rodrygo vuelva al banquillo.
Ante esta situación, Rodrygo no le cierra las puertas a nada. Quiere triunfar en el Real Madrid y no pretende tirar la toalla, pero Ancelotti le debe tener en cuenta y darle el espacio que se merece. Su salida no es una opción para la cúpula del Santiago Bernabéu, pero el futbolista tiene la última palabra.