El brasileño Filipe Luis recibió un homenaje caluroso, pero que supo a poco en comparación con otros jugadores del primer equipo que se han marchado. El lateral fue el invitado central del encuentro realizando el saque de honor antes del Atlético-Levante. Partido que acabó con victoria rojiblanca por 2-1, graciasa los goles de Ángel Correa y Felipe Augusto. Por parte del Levante, Roger Martí fue el encargado de anotar el único tanto del equipo granota.
El flamante campeón de la Libertadores (con el Flamengo capitaneado por Diego Ribas) recibió un emblema conmemorativo entregado por Koke y salió al campo entre un pasillo formado por sus ahora excompañeros. Sus ocho años como rojiblanco fueron agradecidos con una cerrada ovación en la que no hubo ninguna de las fanfarrias de las anteriores despedidas. El brasileño anunció su marcha, un secreto a voces, tras disputar la Copa de América el pasado julio y no había podido volver para despedirse de técnicos, compañeros, directivos y afición.
En las ocho temporadas que el lateral militó en el Atlético, disputó 333 partidos y consiguió añadir a su palmarés siete títulos, entre los que destacan las dos Europa Leagues, obtenidas en el 2012 y 2018, o la liga ganada en 2014. El defensa brasileño aseguró en su despedida que durante su estancia en el club pasó los mejores años de su vida.
Respecto a la decisión de marcharse del club, dijo que el fútbol es muy exigente y los clubes tienen que renovarse cada año y hacer una plantilla competitiva cada año.
Tanto Juanfran como el propio Filipe Luis han extendido la reputación del Atlético de Madrid en Brasil siendo importantes en equipos punteros. En el caso de Juanfran, se marchó al Sao Paolo de la liga brasileña tras 8 temporadas en el club rojiblanco.