El club ha acordado en la Junta General de Accionistas Extraordinaria celebrada en el día de ayer la integración plena del Atlético de Madrid Féminas como una sección del club como uno de los dos puntos del día (también se aprobó la adquisición de una tercera parte del capital del Racing Club de Lens). Hasta el momento el equipo femenino era una entidad asociada al Club Atlético de Madrid. Este paso ahondará sin duda en el proceso de profesionalización en el que se encuentra inmerso el club.
El organigrama del club por supuesto se verá alterado y Lola Romero, pasa a ser directora general de la sección femenina del club abandonando su cargo como Presidenta. A todos los efectos Enrique Cerezo será el presidente también de esta sección.
Así pues una mayor dotación presupuestaria y unas mejores condiciones para las jugadoras, acercándolas más a la plena profesionalización, asegurará permanecer en la senda de éxitos de esta temporada recién finalizada (primera participación en Champions League y primer título nacional: la Copa de la Reina) además de mantener la excelencia en la cantera (el Atleti Féminas B ha quedado campeón de Segunda y campeón de Copa de Madrid y varios equipos de las divisiones inferiores han sido campeones en sus respectivos campeonatos).
A pesar de este paso en la buena dirección en lo institucional, la plantilla actual del primer equipo ha sufrido nueve bajas que están siendo suplidas en su mayoría con jugadoras internacionales en categorías inferiores. Un seguro para el futuro a medio plazo pero que deja un poso de incertidumbre acerca de si el equipo sabrá ser competitivo desde la primera jornada con una plantilla tan joven y con varios rivales como Valencia, Espanyol, Real Sociedad, Barcelona o Levante haciendo importantes esfuerzos para mejorar su plantilla.
Se espera que con esta nueva organización del club, el fútbol femenino de la entidad se profesionalice cada vez más, y que se consigan nuevos éxitos futbolísticos. Por lo tanto, el Atlético de Madrid sigue los pasos de otros clubes como el Barcelona, y asumen la responsabilidad plena de mantener un equipo femenino. Un crecimiento que aportará recompensas dentro del campo.